
(Leer primero la entrada de los chicos, abajo)
Hay música que, a ciertas horas de la noche, debería estar prohibida. Pero es la mejor nave para subir a mi luna. Abróchense los cinturones, hablamos de chicas.
Anoche estaba dando vueltas a mi cabeza (bum bum…bum bum), pensaba en el Tiki, en Bertin, en Benancio y me preguntaba que tipo de chica les podía venir bien. Eso que llaman asentar la cabeza. Me parece...